miércoles, 27 de agosto de 2008

fundacion rugby amistad argentina

Lo invitamos a leer los siguientes testimonios de miembros de la Fundación Rugby Amistad de Argentina:

*
Y así vive hoy Francisco Maggio
*La historia de Fernando Patin Colombo
*Aldo Monti, miembro de la Fundación Rugby Amistad
*Diego Elías
*Luis Benítez

Y así vive hoy Francisco Maggio.
En un partido amistoso sufrió un grave accidente.
Francisco "Pancho" Maggio hoy tiene 25 años y vive en San Isidro, para algunos la capital del rugby en Argentina. Actualmente está cursando el cuarto año de arquitectura en la Universidad de Buenos Aires y es miembro de la Fundación Rugby Amistad.pero su historia en el rugby sufre un vuelco el 29 de julio de 1989 cuando jugaba en menores de 17 del San Isidro Club, en un partido amistoso contra Belgrano Athletic y sufre un accidente en la columna cervical.

¿Cómo fue tu accidente?
Yo jugaba de hoocker y estábamos en un partido amistoso contra Belgrano Athletic. Estábamos haciendo un scrum 5. Me acuerdo que era un día lluvioso y la cancha estaba embarrada, después de varios intentos de scrum finalmente se vuelve a derrumbar y me lesiono las vértebras 4 y 5 de la columna.

¿ Como fue tu rehabilitación?
Luego del accidente fui operado de las vértebras, porque había sufrido un desplazamiento de las mismas y había que fijarlas. La operación se hizo en la Clínica Mater Dei por el médico Jorge Salvat.

La charla continúa y Maggio explica: "Después de estar siete meses internado en ALPI, donde hice mi rehabilitación, inmediatamente me fui de gira con mis amigos del club a Estados Unidos y Canadá. Esa gira la habíamos planeado antes del accidente". Pero tal vez lo más importante para Pancho Maggio en su rehabilitación fue "mi familia que siempre estuvo a mi lado y la de mis amigos que nunca me dejaron solo y eso fue un gran estímulo para mí"

¿Cómo empezaste vos en la Fundación Rugby Amistad?
Cuando Ignacio Rizzi (presidente de la Fundación) vuelve de Francia en donde había estado jugando y se lesiona, se contacta con Fernando Patín Colombo (actual vicepresidente) y conmigo. El nos cuenta cómo funcionaba el Rugby Amistad en Francia y nos propone juntarnos para tratar el tema. Es entonces, que los primeros pasos de Rugby Amistad comienzan a hacerse realidad. A partir de allí, los tres amigos se reunieron a hablar y surgieron las fuerzas para llevar adelante el proyecto de la Fundación Rugby Amistad de la Argentina. "La idea nos pareció muy buena y entre los tres decidimos crear una Fundación acá, en la Argentina", recuerda Maggio.

¿Qué es el rugby hoy para vos?
Es una escuela de vida donde te enseñan qué es la amistad, la disciplina, el esfuerzo y es una guía para toda la vida de quien practicó ese deporte alguna vez.El sueño de Pancho Maggio es terminar su carrera de arquitectura en la UBA y estamos seguros que se va a cumplir porque es un hombre que nunca bajó los brazos, a pesar del mal momento que alguna vez pasó. Tiene un gran futuro por delante y él lo sabe. Así vive hoy Francisco "Pancho" Maggio.
Luis Benítez




La historia de Fernando Patin Colombo .
Una lesión lo alejó de las canchas en 1986. El vicepresidente de Rugby Amistad habla de su lesión y su recuperaciónFernando Patín Colombo tiene 29 años y vive en La Plata. Actualmente trabaja de abogado y es entrenador de menores de 19 en La Plata Rugby.El 12 de mayo de 1986 Fernando jugaba para La Plata en el puesto de ala, en un partido contra San Carlos. En ese encuentro en un ruck se lesionó la columna cervical.

¿Cómo fue tu accidente?
Después de una salida de mitad de cancha, yo iba con la pelota y formamos un ruck que se derrumbó y se me cayeron encima del cuello. Eso me provocó una lesión en las cervicales 6º y 7º de la columna. No me desmayé, pero me trasladaron al hospital donde me operaron y luego realicé mi rehabilitación en ALPI.

¿Cómo te sentís ahora después del accidente?
Nunca tuve un bajón anímico. Pude terminar la secundaria, recibirme de abogado y hasta soy entrenador de rugby. Por el accidente no pienso dejar de hacer las cosas que más me gustan.

¿Cómo actuaron tu familia y tus amigos?
Ellos fueron los más importantes para mi rehabilitación. Es más, se me dio la oportunidad de rehabilitarme en Estados Unidos pero preferí quedarme en Argentina para estar más cerca de mi familia y de mis amigos. Me pareció más importante la parte afectiva que irme a otro país y estar sólo.

¿Cuál es tu cargo en la Fundación?
Soy el vicepresidente. Tengo un voto como todos lo que la componen. Me toca reemplazar a Nacho Rizzi, el presidente, cuando? no está, pero lo manejamos entre los dos.

¿Qué te dio la Fundación en estos años?
Primero la tranquilidad de que se hizo una Fundación que no existía, en el sentido de poder ayudar a chicos que se accidentan. Antes, por ejemplo cuando yo me accidenté, no había seguro; entonces nosotros luchamos por un seguro para ayudar económicamente a cada chico que se accidentara y de nuestra experiencia en estos tipos de accidente. Lograr ese seguro fue una gran satisfacción que me dio la Fundación.

Fernndao Patín Colombo es un excelente abogado, un gran entrenador, un buen amigo y, sobre todas las cosas, una gran persona, que a pesar de haber sufrido un accidente grave, nunca pensó en bajar los brazos y es un ejemplo de vida para sus semejantes.
Luis Benítez

Aldo Monti, miembro de la Fundación Rugby Amistad
"En este deporte se consiguen amigos de verdad"Aldo Monti tiene 37 años y trabaja en el INTA, en Castelar, en la parte de genética y enseña agronomía en la Universidad Católica y veterinaria en la Universidad del Salvador. Pero el 25 de mayo de 1997 sufrió un accidente jugando al rugby para el San Isidro Club, que le provocó una lesión en la columna cervical que lo alejó de este deporte, pero esto no le impidió seguir con su vida.

Aldo, ¿contanos cómo fue tu accidente?
Era un partido contra Banco Nación en Menores de 16. Yo jugaba de hoocker. Era un día lluvioso y me acuerdo que la cancha estaba muy embarrada. Se forma un scrum y cuando el medio va a tirar la pelota se derrumba la formación. En ese momento yo caigo con la cabeza contra el piso y todo el peso del pack cae sobre mí, lo que me produce una lesión de columna cervical al nivel de C5.

¿Cómo afrontaste esa situación?
estaba en cuarto año de la secundaria y a esa edad es muy difícil afrontar una situación de estas características. Pero pude salir y terminar la secundaria con mis compañeros. También pude recibirme de ingeniero agrónomo y trabajar de lo que me gusta.

¿Qué ayuda recibiste?
En aquel momento todavía no existía la Fundación Rugby Amistad, así que recibí ayuda del SIC que se hizo cargo de los gastos del hospital.

¿Cómo fue tu rehabilitación?
Al principio fue difícil porque con el accidente había sufrido un paro cardio -respiratorio y me tuvieron que realizar una traqueotomía. Así que primero me recuperé de los problemas respiratorios y después empecé con la parte motriz. Estuve 11 meses internado en el Instituto Nacional de Rehabilitación y luego seguí el tratamiento en mi casa con un kinesiólogo particular.

¿Cómo reaccionaron tu familia y tus amigos?
Fueron lo más importante porque creo que sin ellos no hubiera salido de esta situación

¿Cómo te sentís ahora, después del accidente?
Me siento bien y no tengo rencor hacia nadie. Al contrario le estoy agradecido a mucha gente.

¿En qué te ayuda la Fundación Rugby Amistad?
La ayuda que recibí de la Fundación es que me da un lugar en donde plantear mis inquietudes, no sólo a mí sino a todos los chicos que se accidentaron. Por otro lado es muy importante lo que están haciendo de tratar de que no haya más accidentes de estas características. También me ayudan en la parte económica y recibo 500 pesos mensuales.

¿Qué es el rugby para vos?
El rugby para mí es una filosofía de vida , en donde somos parte de un equipo que empujan todos para adelante. Y en ese momento difícil de mi vida estuvieron cerca muchas personas relacionadas con el rugby.

¿Qué le podés decir a los chicos que no se animan a jugar al rugby por enterarse de estos accidentes?
Mirá, yo creo que cada uno tiene que decidir lo que quiere hacer de su vida. Por otro lado, si te tiene que pasar algo no sólo te puede suceder jugando al rugby. Y este deporte es uno de los mejores porque acá se consiguen amigos de verdad.

Aldo Monti pudo rehacer su vida después de un grave accidente, y lo hizo con mucha voluntad y esfuerzo. Muchos de nosotros lo tendríamos que tomar como ejemplo, porque a pesar de tener inconvenientes para movilizarse, logró terminar lo que quería y hay que felicitarlo por su entrega.


Diego Elías
Un accidente lo dejó afuera de las canchas a los 19 años.Diego Elías nació un 12 de abril de 1975. Jugaba un Universitario Rugby Club, generalmente como wing hasta que un 13 de marzo de 1994, a los 19 años, se accidentó con una mala caída después de un tackle en un partido en el que jugaba como inside. La historia de Diego Elías cuenta que en el primer pronóstico médico, los especialistas dijeron que no existía ninguna posibilidad de recuperación por su lesión en la 4º y 5º cervical. Pero sin embargo, recuperó la sensibilidad en todo el cuerpo. Actualmente, tiene mayor movimiento en los brazos y tronco, y mejoró esfínteres.

¿Cómo reaccionaron tus compañeros del club a partir del accidente?
Al principio, después del accidente mis compañeros estaban 100 por ciento conmigo y querían acompañarme todo el tiempo. A tal punto que organizaron turnos de visita para estar conmigo.

Sus amigos, con la ayuda del médico, le hacían fisioterapia y así movilizaban los dedos y las piernas. Ahora continúa con kinesiología por su obra social aunque su tratamiento está interrumpido porque la persona que lo atendía fue despedida y todavía no está el reemplazo.

¿Dónde estuviste internado y cómo fue tu rehabilitación?
Estuve internado en Tucumán, en Córdoba y después en Cuba para una segunda operación ya que la primera fue mala.

¿Qué ayuda recibiste?
La provincia de Tucumán y el rugby tucumano estuvo ayudándome a través de un partido a beneficio. Además la Fundación Rugby Amistad me ayudó mucho porque cuando estaba en mi peor momento Nacho Rizzi (presidente de Rugby Amistad Argentina) viajó a Tucumán y ayudó a mi padre a realizar correctamente los trámites necesarios.

¿En este momento cuáles son tus necesidades económicas?
Mi situación económica es mala, mi papá se quedó sin trabajo. Además vivo en un duplex con escaleras y es casi imposible moverme. La mayoría del tiempo estoy con mi abuela que tiene 60 años y ella no me puede ayudar a movilizarme en las tareas de la vida diaria. Tengo una silla AKTIVA que compré con la plata que me sobró de la operación en Cuba.

Actualmente, Diego trabaja como vendedor a comisión en la Buenos Aires Seguros de Vida. Para poder ver a los clientes necesita dos chicos que lo ayuden a trasladarse y él mismo tiene que costear esos gastos. Lamentablemente, por su corta edad -23 años- y sus escasos contactos, su cartera de clientes es mínima, y además "no cualquiera se adhiere a un seguro de vida". Para el futuro, Diego sueña con conseguir otro trabajo, aunque en este empleo lo tratan "muy bien". "Me gustaría trabajar en un negocio bajo techo, y no andar todo el día de acá para allá. Quiero tener un título, terminar mis estudios de inglés, y de computación. Tengo una 286 en mi casa y me prestaron una impresora". Diego también terminó de cursar su primer año en Ciencias Económicas. "Me gustaría seguir porque tenía buenas notas -comenta- pero para trasladarme necesito dos chicos que me ayuden".

¿Tenés algún tipo de resentimiento hacia el rugby?
No, para nada. Es lo mejor que hay. Inclusive estaba entrenando la 5º del club. Tengo un hermano de 14 años, Gaspar, que jugó al rugby pero después de dolores de espalda frecuentes, se hizo estudios y le prohibieron seguir. Cuando tuve el accidente mi hermano me preguntó si él podía seguir jugando y yo le contesté que era decisión propia.

¿Qué le dirías a los chicos que no se animan a jugar al rugby por enterarse de estos accidentes? Que si no se animan a jugar, pueden ir a ver el ambiente y entrenar, y tomar su propia decisión.


Luis Benítez
Luis Benítez tiene 23 años y vive en Villa Tesei, Hurlingham y actualmente estudia periodismo deportivo en Deportea. En julio de 1993 partió de gira a Nueva Zelanda y Australia junto con sus compañeros de la Menores de 19 de Cardenal Stepinac. El 17 de ese mes mientras jugaba contra Tauranga School sufrió un accidente que lastimó su columna cervical.

Luis, ¿contanos qué fue lo que pasó?
El 17 de Julio del 93 nos encontrábamos de gira por Nueva Zelanda, en ese entonces yo tenía 18 años y jugaba de segunda línea en la Menores de 19 de Cardenal Stepinac. Estábamos jugando contra Tauranga School y tras formar un scrum, cuando salió la pelota yo caí al suelo y cuando quise levantarme no pude. De inmediato comencé a sentir que me faltaba el aire y en ese momento el doctor Carlos Navarte, médico de cabecera de mi familia, comenzó a hacerme respiración boca a boca hasta que llegó la ambulancia. Ahí me realizaron los primeros auxilios y me llevaron al hospital municipal. Recuerdo que también estaba el Yankee Braceras. Yo estaba conciente hasta que me subieron a la ambulancia, luego cuando desperté estaba en el hospital con un respirador artificial.

¿Cuál era el cuadro?
Yo me había lastimado la 2º y 3º vértebra cervical, sufrí un desplazamiento de las mismas y estaba cuadriplégico, y con un respirador. Debían operarme, aunque para eso necesitaban la autorización de mis padres, quienes viajaron de inmediato a Nueva Zelanda.

LA AYUDA RECIBIDA. El Colegio Cardenal Stepinac se hizo cargo de los gastos del viaje de José Luís e Irma, sus padres, y toda la ciudad de Tauranga se movilizó haciendo colectas.
Incluso los All Blacks realizaron una subasta para recaudar fondos para Luís Benítez, y remataron entre otras cosas la camiseta de John Kirwan.Todo ese esfuerzo de la gran familia del rugby fue destinado a cubrir los gastos de internación y parte de la operación y rehabilitación de Luís. El seguro Universal Assistance cubrió la mitad de la operación. Ya de vuelta en Buenos Aires la Fundación Rugby Amistad se puso en contacto con Luís Benítez.

¿Cómo actuó la Fundación Rugby Amistad en tu caso?
Se puso en contacto conmigo y a partir de ahí me brindaron apoyo moral. Además yo necesitaba un respirador artificial y me lo consiguieron. Yo estuve dos meses en cama en el Mater Dei y luego seguí mi rehabilitación en San Juan de Dios y siempre la Fundación me brindó su apoyo.En un partido de Los Pumas la Fundación colocó urnas para recaudar fondos para Luís Benítez. Este trabajo lo realizaron junto con los chicos del Colegio Cardenal Stepinac.

Luís Benítez se incorporó a la Fundación en 1994 y actualmente es Vocal Titular.
A partir de este año Luís tendrá activa participación periodística en este suplemento de la Fundación Rugby Amistad. Además Luís es beneficiario del Fondo Solidario.

Luis, ¿y cómo estás ahora?
Ahora estoy bárbaro, puedo caminar sin ayuda y el único inconveniente que tengo por lo que recibe todos los meses un subsidio de 500 pesos. es mi brazo derecho que sigue en rehabilitación, pero de todas formas no me obstaculiza para anda. Puedo moverme por mí mismo y es más, ahora empezé la carrera de periodismo deportivo en Deportea y posiblemente este año comienza a realizar algunos trabajos relacionados con mi carrera.

Luis Benítez ha desarrollado un gran esfuerzo por lograr su recuperación. En este camino lo han acompañado su familia, sus compañeros de colegio, sus parintes, la Fundación y toda la familia del rugby.Luís dice que lo que le pasó a él pasa una vez en un millón de casos y que este accidente lo podría haber tenido practicando cualquier otro deporte. Luís ama el rugby, invita a jugarlo y sigue yendo a ver partidos. Ahora, desea poder llegar a ser un excelente periodista deportivo. Sabemos muy bien que sabe pelearla y seguramente lo logrará.
Juan Carlos Muzzio

No hay comentarios: